La sabiduría del chef Martín Berasategui, poseedor de 10 Estrellas Michelín, alumbra a todos los que hacemos Frial. Nos encanta contar con sus consejos como asesor gastronómico de nuestra marca. Y, por supuesto, nos encanta poder compartir contigo algunas de esas recetas que lo han hecho famoso en todo el mundo.

Por eso hoy queremos enseñarte una de esas ideas sencillas y exquisitas que lo han convertido en todo un maestro de la gastronomía: un sándwich riquísimo de jamón ibérico y mozzarella. ¿Quieres saber cómo prepararlo? Te lo contamos aquí abajo:

Ingredientes

Para la vinagreta de hierbas

  • 2 huevos
  • 20 g de mostaza de Dijon
  • 140 ml de aceite de oliva virgen extra
  • 600 ml de caldo reducido a 60 ml
  • 40 g de miga de pan de brioche remojada en leche y escurrida
  • 15 g de hojas de perejil
  • 15 g de cebollino
  • 10 g de hojas de perifollo
  • 40 g de alcaparras
  • 30 g de pepinillos en vinagre
  • 15 ml de vinagre de sidra
  • Sal

Elaboración

Empezamos preparando la vinagreta de hierbas. Para ello, cocemos los huevos –a partir de agua hirviendo con sal– durante unos 3 minutos. Después, los sacamos del agua y los refrescamos en un bol con agua con hielos. Así cortamos la cocción. Pelamos los huevos y los reservamos. Recuerda que las yemas deben quedarnos crudas.

Trituramos todos los ingredientes –salvo el aceite– en el vaso de una batidora americana. El aceite vamos a añadirlo poco a poco para ir mezclando gradualmente la vinagreta.

Por último, ponemos a punto de la sal teniendo en cuenta que el sándwich ya lleva Jamón Ibérico y que este suele estar subido de sazón.

Para rematar el sándwich, untamos una cara de cada uno de los panes con la mantequilla en pomada. Les damos la vuelta y, sobre las mismas, rociamos 20 ml de vinagreta de hierbas. Añadimos la mozzarella cortada en láminas finas y el Jamón de Bellota Ibérico. Y en las otras tapas incorporamos otros 20 ml de vinagreta de hierbas.

Después, montamos unas tapas con otras dejando siempre la cara con mantequilla para fuera y tostamos los sándwiches en una sartén antiadherente a fuego muy suave durante unos 3 minutos por cada lado. Justo hasta que veamos que los sándwiches están bien dorados por fuera y jugosos por dentro. 

¡Y listo! Ya tienes un riquísimo plato para conquistarlos a todos.